El 21 de septiembre de cada año se celebra el día internacional de la paz. La ONU lo estableció justo al inicio de su Asamblea Ordinaria y convoca a todas las naciones y personas del mundo a realizar acciones para que ésta sea posible. El tema de este año es “Paz y democracia: haz que tu voz se oiga”. La paz se concibe en el ámbito internacional no sólo como un no a la guerra y a la violencia, sino como la construcción positiva para que los derechos humanos sean respetados. La paz y la democracia están vinculadas íntimamente y la ONU quiere impulsarlos juntos pues constituyen una alianza que promueve el bienestar de todos.

Una sociedad en guerra difícilmente puede practicar democracia en su sentido amplio y participativo. Un país en guerra ocupa energía y recursos en sus batallas y en su propaganda: queriendo vencer, convencer y ganar mentes y corazones. Un país en guerra mantiene a su pueblo distraído y atemorizado; haciéndolo incapaz de participar libremente en las grandes decisiones, como por ejemplo dónde invertir el dinero de sus impuestos.

Un simple ejemplo: en el gobierno de Calderón casi duplicó en cinco años su presupuesto de guerra: en 2006 la SEDENA ejerció 26 mil 31 millones 900 mil pesos, y en 2011, 50 mil 39 millones, mientras que la SEMAR pasó de 9 mil 100 millones en 2006 a 18 mil 270 millones. Paz y no guerra. Derechos humanos y no armas. Muchos días de paz y construcción de democracia – que no necesariamente elecciones –.